laseroterapia

La laseroterapia es una forma de tratamiento médico que utiliza la energía lumínica de un láser para diagnosticar o tratar condiciones de salud. Los láser emiten luz monocromática y coherente, con una intensidad que puede variar desde niveles bajos, usados para biomodulación, hasta potencias altas para cirugía. En la práctica clínica se distinguen principalmente la terapia con láser de baja potencia (low-level laser therapy, LLLT) y los láseres quirúrgicos de alta energía.

El mecanismo de acción depende de la radiación y la dosis: la fototermia, la fotobiomodulación y, en algunos casos, la fotodisrupción mecánica o ablación. La LLLT busca activar procesos celulares y reducir la inflamación y el dolor, mientras que los láseres de alta energía cortan, coagulan o eliminan tejido de forma precisa.

Las aplicaciones abarcan dermatología (reparación de heridas, cicatrices, fotoenvejecimiento, depilación), oftalmología (tratamientos selectos de retina y ciertas intervenciones corneales), odontología (cirugía de tejidos blandos, alisado de conductos, blanqueamiento dental), medicina física y rehabilitación (manejo del dolor musculoesquelético) y tratamiento de lesiones vasculares o tumorales en contextos específicos.

La seguridad depende del tipo de láser y del uso correcto. Es esencial el uso de protección ocular adecuada y personal entrenado. Los riesgos incluyen quemaduras, daño ocular y daños en tejidos circundantes. Las contraindicaciones y protocolos varían, por lo que la terapia debe realizarse bajo indicación médica y en equipos regulados.

Las evidencias científicas apoyan ciertos usos de la laseroterapia, como la facilitación de la cicatrización de heridas y la reducción de la inflamación en condiciones específicas, pero para muchas situaciones los resultados son mixtos y se requieren más ensayos rigurosos. En general, se considera una modalidad segura cuando se emplea adecuadamente.