síncrona

La palabra síncrona deriva del griego synchronos, que significa "que sucede al mismo tiempo". En español, síncrona se usa para describir elementos que comparten un referencia de tiempo común, habitualmente un reloj o un señalizador temporal. Su antónimo es asíncrono, que se refiere a relaciones temporales no coordinadas.

En informática y telecomunicaciones, lo síncrono describe sistemas y procesos regidos por una señal de reloj común. En la transmisión síncrona, los datos se envían en intervalos regulares, con una sincronización fija entre emisor y receptor. En contraste, la transmisión asíncrona permite variación en el intervalo entre bits y usa bits de inicio y parada para la sincronización. Los diseños lógicos síncronos coordinan operaciones mediante bordes de reloj, lo que facilita el diseño y la predicción del rendimiento.

En memoria y hardware, la memoria síncrona (SDRAM) responde a un reloj global y ejecuta operaciones en impulsos del reloj, lo que mejora el rendimiento y la alineación de señales. Los buses y los circuitos digitales síncronos suelen simplificar la temporización a costa de una menor tolerancia a variaciones de velocidad.

En ingeniería eléctrica, un motor síncrono mantiene una velocidad cercana a la del campo magnético giratorio alimentado por la red; la velocidad se relaciona de forma casi constante con la frecuencia de la fuente y el número de polos. Son comunes en aplicaciones de alto rendimiento y control preciso.

En lingüística, un análisis sincrónico observa una lengua en un momento específico, sin considerar su evolución histórica; se contrapone al análisis diacrónico, que estudia cambios a lo largo del tiempo.

En resumen, lo síncrono implica coordinación temporal y dependencia de una referencia común de tiempo, con usos predominantes en tecnología, ingeniería y lingüística.