medicamentoas

Medicamentos son sustancias utilizadas para prevenir, diagnosticar, tratar o aliviar enfermedades y alteraciones de la salud. Pueden ser químicos, biológicos o derivados de fuentes naturales y se administran de diversas maneras según la indicación: por vía oral, intravenosa, intramuscular, tópica, inhalada, entre otras. Se presentan en múltiples formulaciones, como tabletas, cápsulas, soluciones, suspensiones, cremas, aerosoles y parches transdérmicos.

Clasificación y usos

Se clasifican según su origen (químicos, biotecnológicos, derivados de plantas), su uso terapéutico (tratamiento, prevención), su forma farmacéutica y su vía de administración. También se diferencian entre medicamentos de venta libre y aquellos que requieren prescripción médica. Algunos están diseñados para grupos específicos (p. ej., niños, pacientes con enfermedades crónicas) y otros requieren monitoreo médico constante.

Desarrollo, regulación y seguridad

El desarrollo de un medicamento implica investigación preclínica y ensayos clínicos en fases para evaluar eficacia y seguridad. La fabricación debe cumplir normas de calidad y buenas prácticas de fabricación. La aprobación normativa depende de agencias regulatorias de cada país; ejemplos comunes incluyen agencias regionales y nacionales. Tras la aprobación, la farmacovigilancia supervisa efectos adversos y riesgos postcomercialización para garantizar seguridad a largo plazo.

Uso adecuado y acceso

El uso correcto requiere indicación profesional o farmacéutica, adherencia a dosis, duración del tratamiento y reconocimiento de posibles interacciones con otros fármacos o alimentos. Existen preocupaciones sobre errores de medicación, resistencia a tratamientos y medicamentos falsificados, lo que subraya la importancia de la educación del paciente y la supervisión clínica. Medicamentos son un componente esencial de la salud pública y su acceso y uso responsable impactan significativamente en los resultados sanitarios.