adelgazamiento

El adelgazamiento es el proceso de reducir el peso corporal, generalmente mediante un déficit calórico sostenido. Puede estar motivado por razones estéticas, de salud o médicas, y puede ocurrir en personas con sobrepeso, obesidad o peso normal.

La pérdida de peso depende principalmente del balance entre ingesta y gasto de energía, aunque intervienen factores metabólicos, hormonales, médicos y sociales. A corto plazo se observa una reducción del peso total por pérdida de agua y de masa grasa; a largo plazo la masa grasa suele ser el componente principal.

Las estrategias más comunes combinan dieta, actividad física y cambios conductuales. En la dieta se busca un consumo calórico adecuado y una alimentación equilibrada que aporte nutrientes esenciales, con énfasis en frutas, verduras, proteínas magras y granos enteros, reduciendo azúcares añadidos y alimentos ultraprocesados. En la actividad física se recomienda combinar entrenamiento aeróbico con fuerza para preservar la masa muscular. En los cambios conductuales se incluyen el auto-monitoreo, fijación de metas realistas, apoyo social y manejo de desencadenantes.

En situaciones de sobrepeso clínico u obesidad, la supervisión médica es recomendable; pueden considerarse fármacos en determinados perfiles y, en casos seleccionados, intervenciones quirúrgicas. Los resultados varían y requieren paciencia; las pérdidas sostenidas suelen estar en el rango de medio kilogramo a un kilogramo por semana con planes bien diseñados. Las pérdidas rápidas pueden asociarse a deficiencias nutricionales, pérdida de masa muscular y efecto rebote.

La evaluación incluye indicadores como el índice de masa corporal, la circunferencia de la cintura y la presencia de comorbilidades para orientar el plan de adelgazamiento y su seguimiento.