Blanqueadora

Blanqueadora es la forma femenina de blanqueador y puede referirse a varias cosas: un producto o sustancia que blanquea o descolora materiales; un proceso o equipo utilizado para eliminar color. Se aplica en contextos domésticos, industriales y textiles.

En términos químicos, los blanqueadores comerciales son oxidantes. Pueden ser de cloro, como el hipoclorito de sodio; de peróxido de hidrógeno; o blanqueadores no clorados como el percarbonato de sodio. Se emplean para blanquear telas, tratar la fibra, blanquear papel y realizar limpiezas profundas en distintas superficies, siempre siguiendo las indicaciones del fabricante.

Seguridad y medio ambiente: estos productos pueden irritar la piel y los ojos y, si se mezclan con otras sustancias, pueden generar vapores peligrosos. Su uso debe hacerse en áreas bien ventiladas, con protección adecuada y siguiendo las recomendaciones de almacenamiento y eliminación. Evita mezclar blanqueadores con amoníaco, ácidos u otros agentes químicos sin indicación explícita.

En el ámbito financiero y criminológico, blanqueadora puede referirse a una persona o entidad que realiza operaciones para blanquear dinero, es decir, convertir ganancias ilícitas en ingresos aparentes. Este fenómeno se combate mediante normativa de prevención de blanqueo de capitales (AML) y medidas de cumplimiento corporativo.

En cosmética, el término también puede aludir a productos destinados a aclarar la piel o uniformar el tono. Su uso está sujeto a regulaciones y a debates sobre seguridad y ética, dependiendo del país y del producto.