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desescalamiento

Desescalamiento es un conjunto de acciones y estrategias orientadas a reducir la intensidad, la violencia o la polarización de un conflicto o situación de crisis. No implica rendición, sino gestionar el conflicto para evitar daños y abrir espacio para negociaciones, acuerdos o soluciones pacíficas. Se aplica en distintos ámbitos, como la seguridad pública, la diplomacia internacional, el ámbito laboral y la atención de crisis de salud mental.

En seguridad pública y mediación, el desescalamiento combina técnicas de comunicación, gestión de distancia, y toma

Las técnicas comunes incluyen escuchar activamente, lenguaje no amenazante, ofrecer opciones verificables, dar tiempo y espacio,

Principios clave: seguridad de todas las partes, legitimidad de las autoridades, proporcionalidad de las respuestas, transparencia

Entre los retos figuran la presión de cortos plazos, sospechas de concesiones, la necesidad de formación continuada

Relaciones con conceptos afines: escalamiento, negociación, mediación, contención y, en ámbitos como la salud mental, desescalamiento

de
decisiones
para
disminuir
la
probabilidad
de
uso
de
fuerza.
En
política
y
relaciones
internacionales,
implica
ceses
de
hostilidades,
compromisos
temporales
y
procesos
de
negociación.
reducir
estímulos
sensoriales,
clarificar
intenciones
y
límites,
y
asegurar
la
rendición
de
cuentas.
y
responsabilidad,
y
consideración
de
contextos
culturales
y
sociales.
y
la
medición
de
resultados.
específico
de
crisis.
El
éxito
del
desescalamiento
suele
medirse
en
la
reducción
de
incidentes
violentos,
tiempos
de
respuesta
y
estabilidad
de
las
relaciones
entre
las
partes
implicadas.