heterocíclicas

Los heterocíclicos, o heterociclos, son compuestos orgánicos que contienen al menos un anillo cerrado en el que uno o más átomos de carbono han sido sustituidos por heteroátomos, como nitrógeno, oxígeno o azufre. Estos anillos pueden ser saturados o insaturados y pueden presentarse como monocíclicos o policíclicos. También pueden ser aromáticos o no aromáticos, dependiendo de la estabilidad electrónica del sistema.

En los heterocíclicos aromáticos, la inserción de heteroátomos mantiene la delocalización de electrones en el anillo, cumpliendo criterios como la regla de Hückel (4n+2 electrones π). Ejemplos comunes incluyen el furan (O), el tiol/f Thiophene (S), la piridina (N), el pirrol (N), el imidazol y la pirimidina. A nivel biológico, los heterocíclicos desempeñan roles clave: muchas bases nitrogenadas de ADN y ARN (purinas y pirimidinas) son estructuras heterocíclicas, y numerosos biomoléculas y fármacos contienen anillos heterocíclicos. Los heterocíclicos no aromáticos suelen ser saturados, como el piperidina o el cicloexano con heteroátomos, y muestran propiedades químicas distintas derivadas de los heteroátomos.

La importancia de los heterocíclicos se evidencia en química orgánica, bioquímica y farmacología. Son componentes estructurales de numerosos medicamentos, pesticidas, tintes y materiales poliméricos. Su síntesis abarca estrategias de cierre de anillo, introducción controlada de heteroátomos y reacciones de sustitución intramolecular, entre otras. En resumen, los heterocíclicos combinan diversidad estructural con peculiaridades reactivas, haciéndolos centrales en muchas áreas de la química y la biología.