adhesivos

Los adhesivos son sustancias diseñadas para unir dos superficies mediante procesos de adherencia y cohesión. Su objetivo es crear una unión capaz de resistir esfuerzos de separación durante un periodo de tiempo. Se aplican en forma de pastas, geles o líquidos y se seleccionan según los materiales y las condiciones de uso.

Se clasifican por origen y por modo de curado. Los naturales incluyen cola animal, caseína y adhesivos a base de almidón. Los sintéticos abarcan resinas termoplásticas y termoestables, como adhesivos epóxicos, de poliuretano, silicona y acrílicos. En cuanto al curado, existen adhesivos que endurecen con calor (termoestables), otros que curan por reacción química o medición de disolventes, y algunos que requieren exposición a la luz ultravioleta para obtener la unión final.

Propiedades importantes de los adhesivos son la resistencia de la unión, la velocidad de adherencia y curado, la compatibilidad con los sustratos, la resistencia a temperatura y humedad, y la resistencia química. También se evalúan la cinética de curado, la toxicidad y las emisiones de compuestos orgánicos volátiles. La cohesión del adhesivo debe ser suficiente para soportar las cargas sin deformarse ni romperse.

Las principales aplicaciones abarcan construcción y carpintería, embalaje y envasado, automoción y aeronáutica, electrónica y telecomunicaciones, textiles y calzado, y usos médicos o dentales en contextos especializados. La elección depende del sustrato, el ambiente, la carga esperada y las condiciones de proceso.

Seguridad y manejo: muchos adhesivos pueden emitir vapores, resultar inflamables o irritantes. Es necesario usar ventilación adecuada, seguir fichas de datos de seguridad y almacenar los productos en envases cerrados y a las temperaturas indicadas para evitar degradación o riesgos.