motocicletas

Las motocicletas son vehículos de dos ruedas impulsados por un motor y diseñados para el transporte, el ocio y la competición. Pueden circular por vías públicas y, en algunos casos, en terrenos sin pavimento. Se alimentan de motores de combustión interna o de motores eléctricos y exigen casco y protección adecuada; su normativa varía por país.

Los orígenes de la motocicleta se ubican a finales del siglo XIX. En 1885, la Daimler Reitwagen es citada entre las primeras motocicletas. A lo largo del siglo XX, la proliferación de fabricantes japoneses y europeos evolucionó la tecnología mediante mejoras en frenos, suspensiones, transmisión y seguridad, facilitando la producción en masa y la popularización.

Existen distintos tipos según uso y configuración: deportivas, touring, cruiser, estándar, dual-sport y enduro, dirt bikes y motos urbanas. También están las motocicletas eléctricas, que utilizan baterías y motores eléctricos; cada tipo prioriza ciertos rasgos como potencia, maniobrabilidad, autonomía o presencia en pista.

Los componentes clave incluyen chasis, motor, transmisión, sistema de suspensiones, frenos y neumáticos. Muchas motos modernas incorporan electrónica de asistencia, control de tracción, gestión del motor, modos de conducción y freno de estacionamiento. En las motos eléctricas, el motor y las baterías sustituyen al tren de potencia tradicional.

Las motocicletas se usan para transporte diario, recreación y deporte. Su uso está sujeto a licencias, registro y seguros; las normativas varían por país. La seguridad depende del casco, la protección personal, el mantenimiento y las condiciones de la vía. El sector genera empleo e innovación tecnológica y un impacto ambiental menor cuando se compara con vehículos de motor de mayor tamaño o peso.