Home

fermentación

La fermentación es un proceso metabólico en el que microorganismos transforman azúcares y otros sustratos en condiciones de bajo o nulo oxígeno, generando energía y cambios químicos que permiten conservar o modificar alimentos, bebidas y productos biotecnológicos. En alimentos, la fermentación aporta aroma, textura y sabor característicos, además de aumentar la vida útil. Existen tipos principales: fermentación alcohólica (levaduras, etanol y dióxido de carbono), fermentación láctica (bacterias lácticas, ácido láctico) y fermentación acética (conversión de etanol en ácido acético), entre otras, como las rutas propiónica o butírica.

En lo metabólico, la fermentación suele apoyarse en la glucólisis para generar piruvato y regenerar NAD+, permitiendo

Usos y alcance: culinarios, como pan, cerveza, vino, yogur, chucrut, kimchi, tempeh y miso; y aplicaciones industriales

Ventajas: mejora del sabor, la textura y la digestibilidad, reducción de antinutrientes y, en ocasiones, generación

que
la
glucólisis
progrese
sin
oxígeno
suficiente.
En
la
fermentación
alcohólica,
el
piruvato
se
descarboxila
a
acetaldehído
y
se
reduce
a
etanol.
En
la
fermentación
láctica,
el
piruvato
se
reduce
directamente
a
lactato.
El
CO2
producido
en
algunas
rutas
explica
el
alvéolo
que
se
observa
en
pan
y
bebidas
carbonatadas.
para
la
producción
de
antibióticos,
aminoácidos,
enzimas
y
biocombustibles,
mediante
procesos
controlados
a
gran
escala.
de
vitaminas.
Seguridad
y
regulación:
requiere
condiciones
sanitarias,
cepas
iniciadoras
y
controles
para
evitar
contaminaciones
y
toxinas;
la
fermentación
es
tanto
una
práctica
ancestral
como
una
herramienta
biotecnológica
moderna.