estereotáxicas

Las estereotáxicas, o técnicas estereotáxicas, son un conjunto de procedimientos médicos que utilizan un sistema de coordenadas tridimensional para localizar con gran precisión objetivos dentro del cuerpo, especialmente en el cerebro, con fines diagnósticos o terapéuticos. Este enfoque permite planificar la trayectoria de acceso y ejecutar intervenciones mínimamente invasivas con alta exactitud.

Históricamente, la estereotáxia se desarrolló a partir de frames o soportes rígidos que fijaban una referencia en la cabeza del paciente y permitían mapping entre la imagen y la anatomía real. En la actualidad existen métodos basados en frames (sistemas estereotáxicos frame-based) y enfoques frameless o guiados por neuronavegación, apoyados en imágenes de resonancia magnética, tomografía computarizada y, a veces, PET o angiografía.

Las aplicaciones de las estereotáxicas son amplias. Se emplean para biopsias cerebrales precisas, ablación de lesiones mediante energía láser, radiofrecuencia o crioterapia, y para intervenciones de neuromodulación como la estimulación intracraneal profunda. En radiocirugía estereotáctica, se dirige radiación de alta precisión a lesiones intracraneanas (tumores, metastasis, trigémino neuralgia) utilizando dispositivos como sistemas de linac o gamma knives, con dosis focalizadas y mínimas exposiciones a tejidos sanos.

La planificación requiere imágenes detalladas y la definición de un objetivo y trayectorias que eviten estructuras críticas. La exactitud típica se mide en milímetros, y factores como el movimiento del paciente o el cambio anatómico pueden afectar la precisión. Entre sus ventajas figuran la menor invasividad y la mayor precisión, aunque conlleva riesgos inherentes como hematomas, infecciones o complicaciones por radiación.