concentraciónpurificación

Concentración y purificación son conceptos centrales en química, biotecnología y análisis. La concentración se refiere al proceso de aumentar la fracción de una sustancia en una solución, ya sea elevando su cantidad o reduciendo el disolvente. Por otro lado, la purificación implica eliminar impurezas o contaminantes para obtener una sustancia con mayor pureza. En muchos casos se persiguen simultáneamente: se concentra una solución para facilitar la purificación o se purifica un producto para facilitar su concentración futura.

Entre los métodos de concentración destacan la evaporación y la separación de solventes por destilación, la cristalización y las técnicas de membrana como ultrafiltración, nanofiltración y osmosis inversa. También se emplean la liofilización y la crioconcentración para conservar y concentrar compuestos sensibles al calor o al ambiente.

Para purificar se aplican filtración, sedimentación y centrifugación para separar sólidos y líquidos; cromatografía (cromatografía de columna, de afinidad, intercambio iónico, exclusión por tamaño) y extracción por disolventes; crystallización selectiva; diálisis y, en biología, electroforesis y ultrafiltración selectiva. Las decisiones de proceso implican balances de masa, rendimiento y grado de pureza.

Las unidades de concentración incluyen molaridad, g/L y porcentaje en peso, entre otros. La pureza se evalúa mediante perfiles de impurezas y límites regulatorios. Las aplicaciones abarcan la preparación de muestras para análisis químico, la producción farmacéutica, la purificación de proteínas y ácidos nucleicos, la industria alimentaria y el tratamiento de aguas.