cohetes

Un cohete es un vehículo autopropulsado que obtiene su impulso expulsando gases a alta velocidad por un motor. El empuje se genera por reacción, sin alas necesarias para sustentación. En español, el término se usa para referirse a cohetes espaciales, cohetes militares y cohetes de pirotecnia, entre otros usos.

Un cohete típico tiene una estructura, un motor de propulsión, combustible y oxidante, y una carga útil. El motor puede ser de combustión interna con propulsores bipropelentes o de un solo combustible. Al quemarse, el combustible y oxidante generan gases que salen por una tobera, produciendo empuje. Muchos cohetes requieren sistemas de guía para dirigir su trayectoria, especialmente en contextos espaciales o militares.

Los primeros cohetes prácticos surgieron en China durante la Edad Media como fuegos artificiales y armas. En el siglo XX, Tsiolkovski, Goddard y Oberth sentaron las bases teóricas y experimentales de la exploración espacial. Durante la Guerra Fría, los cohetes se desarrollaron para misiles balísticos y, tras la década de 1950, para satélites y misiones espaciales. Hoy, los cohetes se utilizan para lanzar satélites, sondas interplanetarias y para investigación aeroespacial, así como en sistemas de artillería y en fuegos artificiales.

Los cohetes se clasifican en cohetes espaciales (lanzadores), cohetes de artillería y cohetes de pirotecnia. Los avances actuales buscan reducir costos, aumentar la eficiencia y promover la reutilización. La seguridad, la gestión de residuos y el impacto ambiental son consideraciones centrales en su diseño y operación.