buspirona

La buspirona es un medicamento anxiolítico no benzodiacepínico utilizado principalmente para el trastorno de ansiedad generalizada (TAG). A diferencia de las benzodiacepinas, no suele producir sedación marcada ni dependencia física cuando se utiliza adecuadamente.

Su mecanismo de acción principal es la agonista parcial de los receptores 5-HT1A, lo que modula la serotonina y contribuye a su efecto ansiolítico. También muestra efectos menores sobre otros sistemas, sin exhibir la típica actividad GABA-A de las benzodiacepinas.

Indicaciones y uso. Está indicada para elTAG y puede emplearse en otros trastornos de ansiedad. No es adecuada para el manejo de ataques de ansiedad agudos y su beneficio suele requerir semanas de tratamiento para hacerse evidente.

Farmacocinética. Se administra por vía oral y tiene inicio de acción progresivo, con mejora en varias semanas y efecto completo a las 4-6 semanas. Se metaboliza en el hígado, principalmente por CYP3A4, y se excreta mayoritariamente por la orina.

Dosis. Se recomienda comenzar con 5 mg dos o tres veces al día, aumentando gradualmente en incrementos de 5 mg cada 2-3 días. La dosis diaria típica oscila entre 20 y 30 mg, con un máximo de 60 mg al día, en varias tomas.

Efectos secundarios y tolerabilidad. Entre los más comunes figuran mareo, dolor de cabeza, náuseas, malestar estomacal, nerviosismo e insomnio. Somnolencia marcada es menos frecuente. La tolerabilidad suele ser buena, con efectos adversos generalmente leves y transitorios.

Interacciones y precauciones. Evitar inhibidores de la monoaminooxidasa (IMAO) y consultar sobre fármacos que aumentan serotonina (SSRIs/SNRIs) por riesgo de síndrome serotoninérgico. El jugo de toronja puede aumentar las concentraciones plasmáticas. Recomendada supervisión médica durante el embarazo y la lactancia.

Presentación. Comercializada como Buspar en varios países; también disponible en formulaciones genéricas. Su uso debe ser determinado y seguido por un profesional de la salud.