Escombros

Escombros es un término utilizado para describir los residuos resultantes de la demolición, derribo o renovación de edificaciones y estructuras, así como los residuos generados por obras de construcción nuevas. Comprende materiales que ya no son útiles para el uso previsto y que deben gestionarse como parte de la gestión de residuos. En la construcción, la generación de escombros es un componente habitual del ciclo de obra, y su manejo adecuado es clave para reducir impactos ambientales y de seguridad.

Los materiales que componen los escombros suelen ser heterogéneos: hormigón y mortero, ladrillos, piedra y adoquines, madera, metales, plásticos, yeso y, en obras antiguas, posibles contaminantes como amianto o pintura con plomo. Por ello, la clasificación y separación son pasos iniciales habituales. En muchos lugares se practica la trituración y cribado para obtener materiales reciclables, como agregado reciclado para hormigón, bases de carreteras y rellenos, o arenas y gravas reutilizables. La valorización de escombros reduce la demanda de recursos naturales y la cantidad de residuos enviados a vertederos. En paralelo, los materiales peligrosos deben gestionarse por separado y de acuerdo con normas específicas para evitar riesgos para la salud y el medio ambiente.

La gestión de escombros está regulada por normativas de residuos y construcción que exigen almacenamiento temporal seguro, transporte autorizado y disposición en instalaciones autorizadas. Las prácticas de minimización, reutilización y reciclaje forman parte de la economía circular y de políticas de sostenibilidad en el sector de la construcción. Un manejo adecuado de los escombros contribuye a la seguridad, a la reducción de impactos ambientales y a la eficiencia de recursos durante el ciclo de vida de las obras.