escalado

Escalado es un sustantivo derivado del verbo escalar y se emplea en varios ámbitos para designar el acto de subir, así como la acción de aumentar la escala, el tamaño o la capacidad de algo. En general, puede referirse tanto a movimientos físicos de ascenso como a procesos de crecimiento o ampliación.

En tecnología de la información y sistemas, escalado describe el proceso de ampliar recursos para soportar mayores volúmenes de usuarios o datos. Se distinguen, de forma común, el escalado vertical (aumentar la capacidad de una única unidad, por ejemplo, un servidor) y el escalado horizontal (añadir más unidades o nodos para distribuir la carga). Este concepto está estrechamente ligado a la escalabilidad, que es la capacidad de un sistema para crecer sin perder rendimiento.

En procesamiento de imágenes y señales, escalado se refiere a redimensionar una imagen o una señal mediante la multiplicación por un factor de escala. El resultado puede ser un escalado hacia arriba (upscaling) o hacia abajo (downscaling). Para conservar calidad, se emplean técnicas de interpolación como vecino, bilineal o bicúbica, entre otras. El escalado también se aplica en videos, gráficos y visualización.

En gestión de servicios e operaciones, escalado puede significar derivar un problema a un nivel superior o a un equipo con mayor autoridad para decisiones o resolución, conocido como escalamiento de incidencias. En contextos de ingeniería o construcción, el término puede aludir al aumento progresivo de la capacidad de un sistema o proyecto para crecer con la demanda.

En deportes de escalada y actividades de montaña, escalado se usa para referirse al acto de subir una pared o ruta, aunque en español común suele emplearse escalada. En resumen, escalado describe tanto movimientos físicos como procesos de crecimiento o adaptación tecnológica.