cifrado

El cifrado, o criptografía, es el conjunto de técnicas destinadas a transformar información de modo que solo pueda ser leída por personas autorizadas. En su forma básica, el proceso implica una función de cifrado y una clave; la forma de gestionar la clave determina si se trata de cifrado simétrico (una misma clave para cifrar y descifrar) o asimétrico (un par de claves, una pública y otra privada).

Los algoritmos de cifrado se clasifican, entre otros criterios, por su uso y seguridad. El cifrado simétrico es rápido y se emplea para proteger grandes volúmenes de datos (por ejemplo AES, ChaCha20). El cifrado asimétrico proporciona autenticación y distribución de claves (por ejemplo RSA, ECC) y se utiliza en firmas digitales y en intercambios de claves mediante Diffie-Hellman.

Las criptografías modernas buscan garantizar confidencialidad, integridad, autenticación y no repudio. Además de cifrar, se utilizan funciones hash (como SHA-256) para verificar integridad; las firmas digitales permiten atribuir un origen verificable, y los certificados ayudan a gestionar identidades en redes y servicios.

Históricamente, la criptografía ha evolucionado desde cifrados sencillos de la antigüedad hasta sistemas de clave pública en la década de 1970 y estándares actuales como el AES, adoptado como estándar de cifrado por muchos gobiernos y sistemas privados a finales del siglo XX.

El cifrado es central en la seguridad de la información y la comunicación en la web, el correo y las redes corporativas. Su adopción requiere una gestión de claves sólida, prácticas de implementación seguras y atención a vulnerabilidades de protocolo o hardware.