amenaza

Una amenaza es una situación potencial que podría causar daño, perjuicio o pérdida. En seguridad y gestión de riesgos, se entiende como una fuente de peligro que puede materializarse, con o sin intención humana. Las amenazas pueden ser de origen natural, humano o tecnológico y pueden afectar a personas, bienes, información, instituciones o ecosistemas. En la evaluación del riesgo, se analiza la amenaza junto con la vulnerabilidad y la exposición para estimar su probabilidad e impacto.

La palabra amenaza proviene del verbo amenazar y, a su vez, del latín minārī, con el sentido de presentar un peligro. En español se utiliza tanto para designar la expresión de hostilidad como para referirse al riesgo potencial asociado a esa acción.

Clasificación: las amenazas pueden clasificarse en físicas (violencia, accidentes), de seguridad (delincuencia, terrorismo, sabotaje), ambientales o de desastres naturales, y cibernéticas (malware, intrusiones, robo de datos). También se consideran amenazas económicas o reputacionales, que pueden afectar la continuidad operativa y la confianza pública.

Gestión de amenazas: la gestión implica identificación, valoración de probabilidad e impacto y priorización. Se emplean modelos de amenazas, análisis de vulnerabilidades y planes de mitigación que suelen incluir disuasión, protección, detección, respuesta y recuperación. En contextos organizativos se apoya en marcos legales y normativos, planes de continuidad y estrategias de comunicación de crisis. La gestión de amenazas es crucial en seguridad pública, infraestructuras críticas, empresas y servicios digitales.

Ver también: seguridad, ciberseguridad, evaluación de riesgos, continuidad del negocio.