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botella

Una botella es un recipiente cerrado para almacenar y transportar líquidos. Está diseñada para contener una cantidad específica, soportar la presión de un cierre y reducir la evaporación. Las botellas se fabrican principalmente en vidrio, plástico o metal; también existen en cerámica o laminados. El vidrio ofrece impermeabilidad casi total y resistencia química, es inerte respecto a la mayoría de bebidas y puede conservar sabores; el plástico (sobre todo PET) es ligero y económico, pero puede sufrir deformaciones, permeabilidad a ciertos aromas y menos barreras. El metal, como aluminio o acero, suele emplearse para bebidas frías o energéticas y requiere un cierre para evitar derrames. Las botellas modernas se componen de partes como cuello, boca, hombro, cuerpo y base. Su capacidad varía desde fracciones de litro hasta varios litros; los tamaños más comunes son 0.25, 0.5 y 1 litro.

La historia de las botellas de vidrio se remonta a la antigüedad; las primeras botellas de vidrio

se
produjeron
en
la
Roma
clásica
y
la
producción
moderna
se
consolidó
a
partir
del
siglo
XVII.
Las
botellas
de
plástico
ganaron
popularidad
en
la
segunda
mitad
del
siglo
XX,
impulsadas
por
la
reducción
de
peso
y
costos.
En
la
actualidad,
la
gestión
ambiental
promueve
el
reciclaje
del
vidrio
y
del
PET
y
el
desarrollo
de
envases
reutilizables.
Las
botellas
cumplen
normas
de
seguridad
alimentaria
y
etiquetado
para
informar
al
consumidor.