uranio

El uranio es un elemento químico de símbolo U y número atómico 92. Es un metal pesado, dúctil y de color plateado que, a temperatura ambiente, presenta una capa de óxido. Es natural y se encuentra en la corteza terrestre, principalmente en minerales de uranio como la pitchblenda (uraninita). Es miembro de la serie de los actínidos.

En la naturaleza, el uranio está formado principalmente por dos isótopos: U-238 (~99,3%) y U-235 (~0,7%), con trazas de U-234. Son radiactivos; la desintegración de U-238 tiene una vida media de 4,47 mil millones de años y la de U-235 de 703 millones de años. U-235 es el único isótopo fisionable en cantidades apreciables en uranio natural, lo que permite su uso en reacciones en cadena para energía nuclear y, en concentraciones mayores, para armamento.

Procesamiento y uso: el uranio extraído se concentra en un concentrado llamado yellowcake (U3O8). Luego se convierte en hexafluoruro de uranio (UF6) y se somete a enriquecimiento para aumentar la proporción de U-235 a aproximadamente 3-5% para combustible de reactor; para armamento se busca un enriquecimiento superior al 90%. El uranio también se utiliza en reactores de investigación y, mediante irradiación, puede generar plutonio-239.

Historia: fue identificado como elemento por Martin Heinrich Klaproth en 1789 y recibió el nombre por el planeta Urano. La radiactividad natural fue estudiada a partir de 1896 por Becquerel y, posteriormente, por los Curies. La primera extracción de metal usable se logró en 1828 por Friedrich Wöhler.

Impacto y seguridad: el uranio es radiactivo y su manejo requiere medidas de seguridad para evitar la exposición. Los residuos y las colas contienen radiactividad y deben gestionarse adecuadamente. Su producción y uso están regulados por normas ambientales, de seguridad y de no proliferación.