reduccionismo

Reduccionismo es una postura filosófica y metodológica que sostiene que los fenómenos complejos pueden explicarse a partir de componentes o principios más básicos, de modo que las leyes de los niveles superiores se derivan de las de los niveles inferiores. Se distingue entre reduccionismo ontológico, que afirma que lo que existe a un nivel superior está plenamente explicado en términos de una realidad más fundamental, y reduccionismo metodológico, que propone, como estrategia de investigación, que las explicaciones deben buscarse en las partes más simples. También se habla de reduccionismo fuerte y reduccionismo débil, dependiendo de cuán total o parcial sea la reducción.

En las ciencias naturales se ha discutido que la química puede reducirse a la física y que la biología puede explicarse en términos de química y física. En la filosofía de la mente y en las ciencias cognitivas se debate si los estados mentales pueden reducirse a estados neuronales, o si existen propiedades mentales irreducibles. En las ciencias sociales, el reduccionismo ha sido criticado por subordinar fenómenos como la economía, la historia o la cultura a explicaciones puramente psicológicas.

Las críticas principales incluyen el emergentismo, que sostiene que surgen propiedades irreducibles; la idea de realización múltiple, que cuestiona la reducción de tipos mentales a procesos neuronales; y limitaciones prácticas y teóricas para la explicación completa de sistemas complejos. En la actualidad se reconoce que ciertos fenómenos pueden reducirse, mientras que otros requieren enfoques a varios niveles y conexiones entre ellos.