cableado

El cableado es el conjunto de cables, conductores, conectores y componentes necesarios para la transmisión de energía, voz, datos y señales entre dispositivos dentro de una instalación. Puede clasificarse en tres grandes familias: eléctrico de potencia, comunicaciones y señalización. En el ámbito de las redes y la electrónica, predominan el cableado de cobre (par trenzado, con o sin blindaje; coaxial) y la fibra óptica, que puede ser monomodo o multimodo.

Una de las prácticas más extendidas es el cableado estructurado, un enfoque estandarizado para organizar el sistema de cableado de un edificio. Este sistema se apoya en una jerarquía de áreas y componentes: cuartos de telecomunicaciones, salas de distribución, armarios de parcheo, bandejas y canalizaciones. Se distingue entre cableado horizontal (desde la sala de telecomunicaciones a las tomas en los puestos de trabajo) y backbone (de una sala a otra). Su objetivo es facilitar la expansión, mantenimiento y mayor rendimiento de la red.

Las normas y estándares relevantes incluyen ISO/IEC 11801, EN 50173 y ANSI/TIA-568, que definen categorías de rendimiento para cobre (por ejemplo, Cat 5e, Cat 6, Cat 6a) y especificaciones para fibra y sistemas de cableado. La instalación debe prever separación adecuada de cables de energía y de datos, gestión y etiquetado, y documentación precisa.

Las pruebas de certificación verifican la continuidad, pérdidas, retardo e diafonía, y confirman que el cableado cumple con las especificaciones para la instalación prevista. El cableado es fundamental en edificios, centros de datos e entornos industriales, proporcionando base fiable para comunicaciones y servicios.