Triaje

Triaje es el proceso de priorizar la atención médica durante emergencias para asignar de manera eficiente recursos limitados. Se emplea en departamentos de emergencia, respuesta a desastres, medicina de campo y operaciones humanitarias. El objetivo es identificar a quienes requieren intervención inmediata frente a aquellos que pueden esperar, y maximizar el número de sobrevivientes.

El término proviene del francés triage, que significa seleccionar o clasificar. La práctica se originó en la medicina de combate y se formalizó en el siglo XX para incidentes de víctimas en masa, siendo el esquema START uno de los más conocidos en Estados Unidos.

Los sistemas de triage suelen categorizar a los pacientes con niveles de urgencia. Schemas de color comunes incluyen rojo para atención inmediata, amarillo para retraso, verde para lesiones menores y negro para fallecidos o personas con pronóstico desfavorable; otros usan niveles de prioridad (P1, P2, P3) o puntuaciones numéricas. Los criterios se basan en evaluaciones rápidas de conciencia, vía aérea, respiración, circulación y capacidad del paciente para caminar o seguir órdenes, a veces empleando signos vitales y el mecanismo de lesión. El objetivo es que el proceso sea rápido y repetible, ya que las condiciones pueden cambiar y los recursos pueden redistribuirse.

En entornos clínicos, el triaje forma parte de la gestión de emergencias y la planificación ante desastres. Las consideraciones éticas enfatizan la equidad y la maximización del beneficio general, con debates sobre criterios, capacitación y adaptaciones específicas del sistema.