Cartilaginosa

Cartilaginosa es el término utilizado para describir todo lo relativo al cartílago, un tejido conectivo semirrígido que se encuentra en diversas partes del cuerpo. El cartílago desempeña funciones de soporte, amortiguación y facilitar el movimiento de las articulaciones, al tiempo que sirve como modelo precursor para la formación de hueso durante el desarrollo esquelético.

Existen tres tipos principales: cartílago hialino, cartílago fibrocartilaginoso y cartílago elástico. El hialino es el más común y se caracteriza por una matriz homogénea con colágeno tipo II; el fibrocartílago es más resistente a la compresión y contiene fibras de colágeno tipo I; el cartílago elástico contiene elastina y es más flexible, como en la oreja y la epiglotis. La matriz está formada por condrocitos en lagunas y abundantes proteoglicanos; estos tejidos son avasculares y, en la mayoría de los casos, están rodeados por pericondrio que facilita el suministro de nutrientes.

En el desarrollo embrionario, el cartílago sirve como molde para la osificación endocondral de muchos huesos largos. En la adultez, la función es de amortiguación de articulaciones y soporte estructural; la regeneración es limitada, y el daño puede predisponer a osteoartritis. Las lesiones y tumores cartilaginosos, como condromas o condrosarcomas, pueden afectar su función.

La investigación en ingeniería de tejidos busca promover la reparación del cartílago mediante condrocitos, células madre y andamiajes biomiméticos para restaurar la función articular.