índigo

El índigo es un color profundo que se sitúa entre el azul y el violeta. También designa históricamente el tinte obtenido de ciertas plantas; en contextos modernos, el término se usa para describir tanto el color como el material pigmentante.

El tinte índigo se extraía tradicionalmente de plantas como Indigofera tinctoria y Isatis tinctoria (woad). Tras la extracción, el tinte se reduce a una forma soluble (leucoindigo) para aplicarlo a las fibras; al exponerse al aire, el tinte se oxida y fija el color en la tela. Es característico de los tintes vat, que requieren un proceso de reducción para impregnarse en la fibra.

Historia y uso: el índigo se empleó ampliamente en Asia, África y Europa desde la antigüedad para teñir textiles. Su importancia creció con la industria del denim en el siglo XIX. A finales del siglo XIX se desarrolló la síntesis química del índigo, permitiendo su producción a gran escala y reduciendo la dependencia de cultivos vegetales. A día de hoy, el índigo sintético es la forma predominante en la industria textil.

Propiedades y aplicaciones: como tinte, el índigo es insoluble en agua en su forma activa y se aplica por reducción a leucoindigo, que es soluble; tras fijarse en la fibra, se oxida de nuevo para recuperar el color azul característico. Se utiliza principalmente para teñir algodón y productos de denim, pero también aparece en aplicaciones de diseño y arte.

En colorimetría, el índigo se ubica entre azul y violeta. En el diseño digital, el color índigo estándar suele representarse con el código hexadecimal #4B0082. El término proviene del latín indicum, en referencia a la India, origen histórico de su tinte.