tácticas

Las tácticas son métodos para lograr objetivos mediante la maniobra de recursos en un espacio y tiempo determinados. El término proviene del griego taktikos y se utiliza en campos como la milicia, los deportes, los juegos y los negocios. En la jerarquía de la planificación, la táctica se sitúa entre la estrategia, que define metas a largo plazo, y la ejecución operativa, que implementa las acciones planificadas.

Las tácticas implican planificación, análisis del contexto y una secuencia de acciones destinadas a obtener una ventaja momentánea o sostenida. Se clasifican en ofensivas y defensivas, y dentro de ellas aparecen maniobras como el envolvimiento, el ataque por sorpresa, la retirada estratégica o la presión continua. Un plan táctico típico considera el objetivo, los recursos disponibles, el terreno o entorno, la información disponible y los riesgos, y suele incluir mecanismos de adaptación ante cambios.

Su aplicación es transversal: en la milicia, en deportes y juegos de estrategia, en negocios y en políticas públicas. En cada ámbito, las tácticas buscan convertir circunstancias a favor mediante decisiones rápidas, coordinación de acciones y aprovechamiento de debilidades o vulnerabilidades del adversario o mercado. La evolución de la tecnología y la información ha ampliado el repertorio táctico, aumentando la importancia de la anticipación, la agilidad y la capacidad de cambio de rumbo.