polisèmica

Polisémica es un término utilizado en lingüística para describir la propiedad de ciertas palabras o expresiones de poseer varias acepciones relacionadas entre sí. Cuando un lexema es polisémico, sus sentidos emergen a partir de extensiones semánticas o reinterpretaciones históricas que conservan un vínculo conceptual que se puede rastrear a un origen común.

La polisemia se distingue de la homonimia. En la homonimia, los sentidos de una misma forma suelen ser independientes y no guardan relación semántica, a menudo derivando de orígenes diferentes. En la polisemia, por el contrario, las acepciones suelen compartir un tronco conceptual y evolucionan por extensión metafórica, metonímica o generalización.

Mecanismos y manifestaciones. Los procesos de desarrollo de la polisemia incluyen la extensión metafórica, la metonimia y la especialización de uso. Así, una palabra puede conservar la idea central y adquirir sentidos nuevos que amplían su campo de aplicación sin perder su vínculo conceptual original. Las variaciones regionales y históricas también influyen en qué acepciones se consideran polisémicas para una misma palabra.

Ejemplos típicos. Banco puede referirse a un asiento para sentarse o a una institución financiera. Llave puede significar un instrumento para abrir cerraduras y, en otro sentido, una válvula o elemento de control en fontanería. Planta puede denotar una entidad vegetal o una planta de una casa (nivel o piso). Estos casos ilustran cómo una misma forma puede abarcar sentidos relacionados en distintos contextos.

Importancia y uso. La polisemia es fundamental en lexicografía, enseñanza de idiomas y procesamiento del lenguaje natural, ya que facilita la interpretación y la desambiguación de significados mediante el contexto.