microimpresión

La microimpresión, o microtexto, es una técnica de impresión que reproduce letras y números de tamaño muy reducido, de modo que solo son legibles con aumento. Se emplea principalmente como característica de seguridad en billetes y documentos oficiales para dificultar la falsificación. En general, el texto o motivo se imprime en alturas de alrededor de 0,2 a 0,4 milímetros y puede presentarse como cadenas de palabras, números o patrones que parecen ruido a simple vista.

Las microimpresiones se generan con procesos de impresión de alta precisión, como offset, huecograbado o impresión de seguridad especializada. En billetes modernos, suelen ubicarse en zonas discretas, como bordes, filigranas o marcos de sellos, de modo que solo se aprecie con lupa o a través de una magnificación. Su presencia funciona como prueba de autenticidad, difícil de reproducir con tecnologías de bajo costo.

Aplicaciones: billetes, pasaportes, tarjetas de identificación, sellos y envases de productos de alto valor, entre otros. La autenticación a menudo se realiza con lupas, lectores o dispositivos que agrandan la imagen para verificar que el microtexto sea legible y consistente. También se utiliza en documentos oficiales y tarjetas de seguridad para reforzar la verificación manual o electrónica.

Limitaciones: los avances en impresión y escaneo permiten imitaciones más precisas, por lo que la microimpresión se utiliza junto con otras medidas de seguridad como tintas que cambian con la luz, hologramas, marcas de agua y elementos táctiles. Además, la legibilidad puede disminuir por desgaste o degradación de color.

Historial y alcance: la microimpresión se popularizó en la seguridad de documentos y moneda desde finales del siglo XX. Hoy se utiliza en muchos países como parte de un sistema de múltiples capas de protección para dificultar la falsificación.