dominación

Dominación es el acto o estado de ejercer poder o control sobre otros. Puede manifestarse en ámbitos sociales, políticos, económicos o culturales, y puede sustentarse en la coerción, la autoridad legítima, la influencia ideológica o una combinación de estos factores. El término proviene del latín dominatio y se utiliza en múltiples disciplinas para describir relaciones de poder.

En sociología y ciencia política, la dominación describe relaciones de poder desiguales en las que un grupo o institución mantiene el control sobre otros. Estas relaciones pueden basarse en la autoridad formal (estado, instituciones), en la coacción (uso de la fuerza) o en la hegemonía cultural (consentimiento general a través de ideas y normas).

Históricamente, la dominación ha sido un rasgo de sistemas como el colonialismo y el imperialismo, así como de estructuras económicas que configuran dependencias entre estados o clases sociales. En estos contextos, la dominación puede traducirse en acceso desigual a recursos, mercados y oportunidades.

En biología y etología, la dominación se observa en jerarquías de grupo, donde individuos dominantes obtienen mejor acceso a recursos, territorio o parejas reproductivas. Aunque presente en especies diversas, estas estructuras pueden variar según las condiciones ambientales y sociales.

En psicología y relaciones interpersonales, la dinámica de dominación y sumisión describe relaciones de poder entre individuos. En contextos consensuados, como ciertas prácticas sociales, la dominación puede formar parte de la interacción, siempre dentro de límites de consentimiento y seguridad. En otros contextos, puede generar conflictos, abuso o negación de autonomía.

Las críticas a la dominación señalan sus efectos desiguales sobre libertad, dignidad y bienestar. Diversas corrientes —feminismo, teoría crítica, estudios postcoloniales— buscan reducir o eliminar estructuras de dominación que sostienen la desigualdad, promoviendo la autonomía y la equidad.