Resiliencia

La resiliencia es la capacidad de adaptarse de manera positiva ante la adversidad, el trauma, el estrés significativo o las condiciones de riesgo. Deriva del latín resiliens, que significa “saltar de nuevo” o “recaer”. En disciplinas distintas, el término se aplica a personas, comunidades, organizaciones y sistemas ecológicos.

En psicología, la resiliencia se entiende como un proceso dinámico que permite a una persona mantener o recuperar su funcionamiento frente a la adversidad. No es un rasgo fijo, sino interacción entre recursos personales, experiencias previas y apoyo social. Se identifica a través de la capacidad de afrontar, recuperarse y aprender de la experiencia. También se estudia desde enfoques de desarrollo, trauma y salud mental.

En otros ámbitos, la resiliencia se aplica a comunidades que se recuperan tras desastres, a organizaciones que se mantienen operativas ante interrupciones y a ecosistemas que resisten o se recuperan ante perturbaciones. En ingeniería y gestión de riesgos, la resiliencia implica diseños y estrategias para anticipar fallos, reducir vulnerabilidades y facilitar la recuperación.

Medición y críticas: se utilizan escalas y evaluaciones de capacidades de afrontamiento, apoyo social y recuperación funcional. Algunos enfoques han sido criticados por sobrestimar la estabilidad de los sistemas o por confundir resiliencia con simple resistencia. En la práctica, se busca promover recursos, redes de apoyo y estrategias de afrontamiento para fortalecer la resiliencia.