Remolcar

Remolcar es un verbo de la lengua española que significa tirar de una carga mediante la fuerza de otro medio de transporte. En uso cotidiano, se aplica principalmente a desplazar un vehículo averiado o mal estacionado mediante un enganche, una grúa de remolque o una correa. También se emplea en contextos marítimos e industriales para describir el acto de arrastrar una embarcación o una carga con un remolcador o vehículo de arrastre.

Uso y contextos: En carretera, remolcar un coche implica engancharlo a otro vehículo y desplazarse con precaución, con luces y señales adecuadas. En marina, un remolcador se acopla a la proa de una embarcación para guiarla a puerto. En logística, puede referirse al movimiento temporal de maquinaria pesada o contenedores mediante equipo específico.

Equipo y seguridad: Los métodos típicos son enganches de remolque, cadenas, correas o ganchos; deben emplearse elementos homologados y, cuando es posible, un remolcador adecuado. El vehículo remolcado debe mantener las señales y, a menudo, frenos y luces operativos. La velocidad, la distancia de seguridad y las normativas locales regulan la maniobra.

Conjugación: Es verbo regular de la primera conjugación. Presente: remolco, remolcas, remolca, remolcamos, remolcáis, remolcan. Pretérito imperfecto: remolcaba, remolcabas, remolcaba, remolcábamos, remolcabais, remolcaban. Pretérito perfecto simple: remolqué, remolcaste, remolcó, remolcamos, remolcasteis, remolcaron.