Hidrofóbica

Hidrofóbica es la propiedad de ciertas moléculas o superficies de repeler el agua o de interactuar de forma desfavorable con ella. En química y biología se aplica a compuestos no polares o con baja afinidad por el agua, en contraste con la hidrofilia, que describe la afinidad por el agua.

El efecto hidrofóbico es un fenómeno termodinámico en el que las moléculas no polares tienden a agruparse para minimizar la superficie expuesta al disolvente acuoso. Este agrupamiento suele incrementar la entropía del agua circundante y es una fuerza impulsora en procesos biológicos como el plegamiento de proteínas y la organización de las membranas celulares, donde las colas apolares de los lípidos se agrupan para formar una bicapa que separa el interior hidrofóbico del entorno polar.

Ejemplos y relevancia: aceites, grasas y muchos hidrocarburos son hidrofóbicos; también ciertos polímeros y superficies recubiertas con materiales no polares. En farmacología y química de materiales, la hidrofobicidad de un compuesto afecta su solubilidad en agua, su permeabilidad y su distribución en el organismo. El coeficiente de reparto entre octanol y agua (logP) se utiliza comúnmente para cuantificar la hidrofobicidad de una sustancia.

Aplicaciones y consideraciones: la hidrofobicidad se aprovecha en la ingeniería de recubrimientos, emulsiones y separación de fases, así como en el diseño de fármacos y biomateriales. También influye en la adhesión de moléculas a superficies y en la estabilidad de interfaces líquidas. La hidrofóbica puede modificarse mediante cambios estructurales que introduzcan o eliminen grupos polares, afectando la interacción con el agua.