pararrayos

Un pararrayos es un dispositivo diseñado para proteger estructuras y personas de la descarga eléctrica de los rayos, interceptando la descarga y conduciéndola de forma segura hacia la tierra. Su objetivo es reducir el riesgo de impactos directos, incendios y daños a instalaciones eléctricas al ofrecer un camino preferente para la corriente.

Un sistema típico consta de tres elementos: un terminal o punta de descarga situado en la parte más alta de la construcción, un conductor que transporta la corriente desde la punta hasta el terreno, y un electrodo de puesta a tierra que disipa la corriente en el suelo. La punta facilita la iniciación de la descarga hacia el conductor, que transmite la energía al sistema de puesta a tierra, donde se dispersa de forma controlada.

Los pararrayos pueden ser de distintos tipos, desde la clásica punta única (punta de Franklin) hasta configuraciones modernas con múltiples terminales y conductores livianos. En edificios y estructuras grandes, es común emplear varios terminales y una red de puesta a tierra con baja impedancia para garantizar una respuesta rápida ante descargas.

La instalación debe ajustarse a normas y estándares de protección contra tormentas, como IEC 62305 o NFPA 780, e incluir una adecuada puesta a tierra, unión equipotencial y mantenimiento periódico. Es importante considerar que un pararrayos es parte de un sistema integral de protección contra rayos, que puede incluir dispositivos de protección contra sobrevoltajes y una correcta puesta a tierra de toda la estructura. En conjunto, reduce los riesgos pero no elimina por completo la posibilidad de daño en todas las circunstancias.