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homotrópica

Homotrópica es la forma femenina del adjetivo homotrópico, utilizada en español para describir fenómenos en los que la acción de una molécula señal o ligando se manifiesta de forma análoga a la del sustrato en un sistema biológico, químico o fisiológico. El término proviene del griego homo- «mismo» y tropos «giro, dirección». En biquímica y farmacología, se emplea principalmente en el contexto de la regulación alostérica de enzimas y receptores: un efector homotrópico es aquel cuyo efecto es ejercido por el propio sustrato, de modo que la unión del sustrato facilita aún más la unión o la actividad del sustrato en sitios adicionales. En contraste, un efector heterotrópico es una molécula distinta al sustrato que modifica la actividad del complejo alostérico, ya sea aumentando o disminuyendo la afinidad por el sustrato.

Un ejemplo clásico en bioquímica es la hemoglobina, donde la unión de oxígeno al sitio de unión

En resumen, homotrópica denota una acción o efecto conducido por el propio ligando o sustrato, en contraposición

facilita
la
unión
de
más
oxígeno
en
otros
sitios,
lo
que
se
describe
como
un
efecto
homotrópico.
Aunque
el
uso
del
término
es
más
habitual
en
contextos
de
regulación
alostérica
y
farmacología,
puede
aparecer
en
textos
que
describen
procesos
en
los
que
el
efecto
es
coordinado
y
se
propaga
de
forma
homogénea
a
través
de
varias
unidades
o
sitios.
a
efectos
mediados
por
otros
ligandos
distintos.