Procuración

Procuración es un término polisémico en español que puede referirse a distintos conceptos según el contexto. En el ámbito jurídico, procuración designa la representación legal de una persona mediante un procurador o apoderado ante tribunales. El procurador gestiona actos procesales, comunicaciones y la transmisión de documentos entre la parte y el órgano judicial. En algunos sistemas, el procurador actúa como intermediario entre el abogado y el juzgado, facilitando la tramitación de expedientes y la existencia de un contacto formal con la autoridad competente.

En la gestión y la administración, procuración sirve como sinónimo de procurement o adquisición: el conjunto de actividades para obtener bienes y servicios para una organización. Esto incluye definir necesidades, analizar proveedores, negociar contratos y gestionar relaciones con proveedores. En entornos empresariales, procurement puede abarcar tanto la estrategia de compra como su ejecución operativa.

En el sector público, la Procuraduría (o Procuraduría General) es la oficina que defiende intereses del Estado ante tribunales o ante la administración, y que vigila el cumplimiento de la ley en ciertos ámbitos. Asimismo, la palabra se emplea en expresiones como procuración de fondos, especialmente en el ámbito de organizaciones no lucrativas, para referirse a la recaudación de recursos.

Etimológicamente, procuración proviene del latín procuratio, de procurare, que significa cuidar de algo o gestionarlo. En su uso cotidiano, la palabra puede aludir a la representación legal, a la función de adquisición de bienes y servicios, o a la función institucional pública vinculada al Estado.