reformándola

Reformándola es una expresión en español formada por el gerundio del verbo reformar, reformando, seguido del pronombre de objeto femenino la. Se utiliza para indicar que se está llevando a cabo la acción de reformar un objeto femenino ya mencionado o implícito, como una ley, una norma, una estructura o un edificio.

Gramaticalmente, funciona como verbo en tiempos progresivos: estoy reformándola, estamos reformándola, etc. El pronombre la señala al sustantivo femenino que recibe la acción de reformar. En oraciones más complejas puede ir acompañado de otros complementos: “Estamos reformándola para cumplir la nueva normativa”; “La comisión está reformándola y se espera su aprobación”.

Notas sobre uso: el acento en reformándola es necesario para conservar la pronunciación correcta al unir el gerundio con el pronombre, de modo que se preserve la silabación y la intensidad de la voz al decir la frase. El término procede de reformar, cuyo origen se encuentra en el latín reformare. Este patrón de gerundio con clítico es común en español, por ejemplo reformándola, leyéndola, estudiándola, entre otros.

Este fenómeno se emplea en contextos políticos, administrativos o técnicos para describir procesos de revisión, mejora o cambio de un objeto femenino, ya sea concreto o abstracto. Al lector se le recomienda identificar a qué sustantivo femenino se refiere la forma para comprender plenamente el alcance de la acción reformadora.