esgrima

La esgrima es un deporte de combate que utiliza la espada para tocar al adversario dentro de reglas específicas de seguridad y puntuación. Sus orígenes se remontan a prácticas de espada en Europa durante la Edad Moderna, y hoy se practica como deporte olímpico a nivel mundial. El término abarca tres armas de combate: florete, espada y sable, cada una con características y reglas propias.

El florete es una arma ligera cuyo objetivo válido es el torso del oponente, incluyendo la espalda, pero excluyendo cabeza y extremidades. Posee una regla de prioridad o derecho de prioridad que determina quién marca cuando ambos tiran a la vez. La espada es la más antigua de las tres y tiene un objetivo válido en todo el cuerpo; no aplica la regla de prioridad, por lo que pueden marcarse toques simultáneos. El sable permite ataques con la punta o con el filo y blanco por encima de la cintura, incluido rostro y manos; también aplica la regla de prioridad.

Equipo y seguridad: los esgrimistas usan máscara protectora, chaqueta acolchada, protector de muñeca, plastrón y guantes. Las espadas están protegidas por guardias y, en las armas modernas, se emplean sistemas de puntuación electrónica con una chaqueta lamé que detecta toques. El entrenamiento combina técnica, táctica, acondicionamiento físico y trabajo de distancia.

Competencias y gobernanza: la Federación Internacional de Esgrima (FIE) regula el deporte a nivel internacional. Se disputan campeonatos mundiales y los Juegos Olímpicos, con competiciones separadas por arma. La esgrima destaca por su énfasis en la técnica, la precisión y la estrategia, además de la seguridad de los participantes.