dormitorios

Un dormitorio es una habitación destinada principalmente al descanso y la intimidad. Su diseño combina confort, ergonomía y funcionalidad, con mobiliario básico como cama, armario o vestidor, mesita de noche y, con frecuencia, una cómoda o tocador.

Según su tamaño y uso, se distinguen dormitorios principales (con frecuencia con vestidor y, a veces, baño en suite), dormitorios secundarios o de invitados, dormitorios infantiles o juveniles, y dormitorios de estudio. En todos se busca una distribución que favorezca la circulación y la privacidad, con iluminación suave y controlable y buena ventilación.

Los elementos opcionales incluyen escritorio, estanterías, mueble TV, o espacio de vestir; la elección de colores, textiles y materiales influye en la sensación de tranquilidad. La iluminación combina luz ambiente, iluminación puntual y, si es posible, temperatura controlada y aislamiento acústico para evitar ruidos.

En la planificación de un dormitorio se consideran el tamaño de la habitación, la ubicación de ventanas, la seguridad y el mantenimiento. En contextos culturales diferentes, el uso del dormitorio puede variar, pero en la mayoría de los hogares modernos es un espacio privado centrado en el descanso.