percusión

La percusión es una familia de instrumentos musicales que producen sonido al golpear, frotar, raspar o activar una superficie o un objeto resonante. Incluye tanto instrumentos de afinación definida como instrumentos de timbre no afinado o de efecto. La percusión desempeña un papel clave en numerosos estilos y contextos, desde la música clásica y la orquesta hasta la música popular, el jazz y las tradiciones del mundo.

Clasificación: según el método de generación del sonido, se agrupan en percutidos (golpe directo), de fricción (raspado o deslizamiento) y, de formas menos comunes, rasgados. Según la afinación, se dividen en afinados (timbre definido) y no afinados. En la clasificación de Sachs-Hornbostel se señalan dos grandes grupos: idiofonos (el cuerpo vibra, como xilófono, castañuelas) y membranófonos (la membrana vibra, como tambores).

Ejemplos de instrumentos: tambores como congas, bongós, djembe o bombo; platillos y platillos suspendidos; panderetas, castañuelas y güiro; claves y cajón; xilófono, marimba, vibráfono y glockenspiel; campanas y campanillas. En la práctica, muchos músicos combinan varios tipos para lograr ritmos, acentos y texturas diversas.

En conjunto, la percusión aporta ritmo, color y marcaje estructural en la música; puede ser central o acompañante y se adapta a contextos educativos, orquestales, populares y tradiciones del mundo. Su estudio abarca técnica ejecutiva, notación y principios de resonancia y afinación, con énfasis en coordinación entre manos y/o golpes, dinámica y articulación.