disidencia

Disidencia es la actitud de quien mantiene una opinión, postura o programa opuesto a la del grupo, la institución o el poder dominante. El término deriva del latín dissentire: to differ, y se usa para describir la oposición o la discrepancia entre ideas dentro de una comunidad política, religiosa, académica o laboral. La disidencia puede expresarse de forma pacífica o conflictiva, y puede abarcar desde críticas públicas y campañas de opinión hasta la organización de movimientos o plataformas que promueven alternativas políticas o doctrinales.

Se distingue entre disidencia política, religiosa, ideológica o académica, y entre disidencia interna (oposición dentro de una organización o partido) y externa (oposición desde fuera). La disidencia política cuestiona políticas, líderes o sistemas de gobierno; la religiosa puede cuestionar dogmas o jerarquías; la académica o profesional cuestiona métodos, evidencias o orientaciones institucionales. En contextos democráticos, la disidencia es vista como parte del pluralismo y el debate; en regímenes autoritarios, puede ser infracción de leyes, censura o represión.

En las sociedades contemporáneas, el reconocimiento de la disidencia depende del marco legal de libertad de expresión, asamblea y prensa. Sus formas incluyen declaraciones públicas, publicaciones, protestas, y organización de coaliciones. La disidencia puede contribuir a la rendición de cuentas, la transparencia y la apertura de reformas, aunque también puede generar conflictos y riesgos para quienes la ejercen, incluyendo acoso, encarcelamiento o ostracismo en contextos hostiles.