Ahínco

Ahínco es un sustantivo masculino del español que designa un esfuerzo intenso, un zeal o una dedicación sostenida hacia un objetivo. Denota energía, compromiso y determinación para superar obstáculos, y suele implicar una intensidad acumulada de trabajo o entusiasmo.

Se usa comúnmente en expresiones como hacer algo con ahínco, trabajar con ahínco o estudiar con ahínco. También puede caracterizar a una persona, por ejemplo “una persona de gran ahínco”, o describir una actitud: con ahínco se persigue una meta, se practica una actividad con entusiasmo y tenacidad.

Notas de uso: el término suele tener una carga positiva y se asocia a la diligencia y la perseverancia. En contraste con palabras como esfuerzo pasajero, ahínco implica continuidad y fortaleza de voluntad, aunque en algunos contextos puede enfatizar la intensidad de la dedicación más que su duración.

Relación léxica: es cercano a empeño, tesón, constancia, perseverancia y entusiasmo. A veces se utiliza para resaltar la dimensión emocional y energética del esfuerzo, no solo su duración.

Etimología: es un vocablo de origen español; su etimología exacta no está plenamente clara en las fuentes modernas, y aparece documentado desde la Edad Media. Se desconoce si deriva de algún verbo antiguo relacionado con inclinarse o agitarse.