neuroticismo

El neuroticismo es una de las cinco grandes dimensiones de la personalidad que describe la propensión a experimentar emociones negativas como ansiedad, irritabilidad, tristeza y vulnerabilidad al estrés, así como la reactividad emocional. Las personas con puntuaciones altas tienden a percibir situaciones como más amenazantes y a responder con preocupaciones y emociones intensas; las puntuaciones bajas se asocian con mayor estabilidad emocional.

Se evalúa mediante cuestionarios como NEO-PI-R/3 y el NEO-FFI. Su fiabilidad y validez han sido consistentes en distintas culturas. La heredabilidad se estima en aproximadamente 40-50%, con contribuciones de ambiente y experiencias vitales que modulan la expresión.

El neuroticismo se relaciona con mayor riesgo de trastornos afectivos y de ansiedad, respuestas más intensas al estrés, y peor bienestar subjetivo. También se ha vinculado a mayor somatización y conductas de afrontamiento menos eficaces. Sin embargo, no determina un trastorno por sí solo y su impacto depende de otros factores de personalidad y contextos.

A lo largo de la vida suele mostrar cierta estabilidad, con cambios moderados; tiende a disminuir ligeramente con la edad. Culturalmente, los niveles pueden variar y la interpretación de las emociones también; se han estudiado diferencias entre continentes y regiones, y se han considerado ajustes para mantener la equivalencia conceptual entre culturas.

Algunas críticas señalan que el constructo puede solaparse con otros rasgos y que la medida depende de la autoevaluación. En clínica, el neuroticismo funciona como rasgo de vulnerabilidad, no como diagnóstico independiente.